
En cada compás, en cada acorde, la música ha sido testigo y protagonista de la historia humana. Este 22 de noviembre, en honor a Santa Cecilia, la patrona de los músicos, celebramos el <<Día Internacional de la Música>>. Sin embargo, detrás de esta festividad musical, se encuentra una historia trágica que nos conecta con el valor y la devoción de Cecilia, quien prefirió la muerte antes que renunciar a su fe en Cristo.
A finales del siglo II después de Cristo, en el Imperio Romano, Cecilia fue arrestada y sometida a diversas torturas por negarse a abandonar su creencia. Su valentía y resistencia son un recordatorio de la fuerza que la música puede conferir incluso en los momentos más oscuros.

A pesar de su martirio, Cecilia cantó alabanzas a Dios antes de ser condenada a muerte por el alcalde Almaquio el 22 de noviembre del año 230. La conexión entre Cecilia y la música se estableció siglos después, en 1594, cuando el Papa Gregorio XIII la nombró patrona de todos los músicos. Desde entonces, cada 22 de noviembre, el mundo celebra el arte sonoro que une corazones y trasciende barreras.
La Música como Expresión de la humanidad
La música no solo es una manifestación de la subjetividad humana, sino también una fuerza que une a las personas más allá de las fronteras y limitaciones. Es un encuentro, un diálogo fraterno y una expresión de resistencia contra la opresión y el totalitarismo en los momentos más oscuros de la historia humana.

A lo largo de los siglos, la música ha sido un medio para expresar las alegrías y tristezas compartidas, creando un vínculo entre individuos y comunidades.
En este siglo XXI, donde nuevos desafíos amenazan la vida y la humanidad se enfrenta a sus propios conflictos, la música emerge nuevamente como un faro de esperanza y un camino hacia el bien común.
La Música como Resistencia y unión en el Siglo XXI
En medio de las guerras modernas y las amenazas a la vida, la música se erige como un refugio y una herramienta para enfrentar la adversidad. En un mundo donde la humanidad, lamentablemente, vuelve a ser «lobo del hombre», la música busca tejer los hilos de la armonía y la solidaridad. Es un recordatorio de nuestra capacidad para encontrar belleza incluso en los momentos más difíciles.
Así, en este Día Internacional de la Música, recordamos la historia de Santa Cecilia y honramos la capacidad eterna de la música para sanar, unir y resistir. Que cada nota sea un testimonio de nuestra humanidad compartida y una celebración de la belleza que puede surgir de la armonía en medio del caos

Los invitamos a conmemorar el dia internacional de la música hoy en la Usina Cultural (Salta).

