El 17 de agosto conmemoramos en Argentina y América Latina una fecha muy importante, el fallecimiento del Gral. José de San Martín, figura destacada de la historia en la gesta por la independencia de Sudamérica.
Nacido en Yapeyú, Corrientes, el 25 de Febrero de 1778, fue el menor de cinco hermanos, una hermana mujer y cuatros varones. Hijo de Juan de San Martín, un militar español, y de Gregoria Matorras, su lugar de nacimiento evangelizada y civilizada por los jesuitas, desarrollaron en él un profundo sentido del deber y la diciplina que luego saldrían a relucir en sus campañas heroicas.
Su historia comienza en 1871, cuando la familia decidió trasladar a San Martín y a sus hermanos de Buenos Aires a España, radicándose en Málaga y luego en Murcia. En dicho lugar San Martín recibiría la educación militar que lo prepararía mas tarde para la liberación de su tierra.
El carácter y la figura de San Martín
Ya formado, San Martín se convirtió en un hombre de porte erguido cuya presencia militar imponía respeto.
Con modales tranquilos y una educación esmerada, su liderazgo se convirtió en una gran fortaleza para motivar y guiar a sus hombres en los momentos más difíciles. Cualidades que serían fundamentales en sus éxitos militares.
El comienzo de la Proeza
San Martín llegó a Buenos Aires el 9 de marzo de 1812, acompañado por Carlos de Alvear. Ya en Buenos Aires, también se les unió Bernardo de Monteagudo, un ferviente revolucionario que lo acompañaría a lo largo de su carrera política y militar.
La Primera Junta le encomendó la tarea de organizar un regimiento para proteger las costas del río Paraná, lo que llevó a la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo, el cual comandaría con gran determinación.
Este regimiento, conocido por su riguroso entrenamiento, tuvo su primera acción significativa en la batalla de San Lorenzo en febrero de 1813, donde las tropas de San Martín derrotaron a las fuerzas realistas.
En 1814, y con una posicion que hiba consolidandose, San Martín fue nombrado jefe del Ejército del Norte, relevando a Manuel Belgrano y tomando contacto con Martín Miguel de Güemes, pieza fundamental, en el diseño del plan continental.
La hazaña histórica: El Cruce de los Andes
Nombrado gobernador de Cuyo, a pedido de él, organizó el Ejército de los Andes.
El Cruce de los Andes, realizado entre enero y febrero de 1817, marcaria el punto de partida para la consolidación de la independencia en Argentina, Chile y Perú. Más de cinco mil soldados equipados con provisiones y animales fueron entrenados para llevar a cabo esta compleja y difícil operación militar.
San Martín audaz e inteligente, utilizó diversas tácticas para confundir al enemigo realista, dividiendo sus tropas en seis frentes distintos, lo que permitió al Ejército de los Andes cruzar la cordillera y enfrentar a las fuerzas realistas en Chile con éxito.
Esta operación táctica, como estratégica no solo fue un triunfo militar, sino también un ejemplo de ese liderazgo y capacidad de planificación que San Martín demostró en sus inicios.
Liberado Chile, el plan le exigió prepararse para avanzar hacia el Perú, para liberarlo en 1821, la cual concluyo de manera efectiva. Dando por terminada su brillante carrera militar en 1822, luego de la «Entrevista de Guayaquil» con Simón Bolívar.
«He convocado al Congreso para presentar ante él mi renuncia y retirarme a la vida privada con la satisfacción de haber puesto a la causa de la libertad toda la honradez de mi espíritu y la convicción de mi patriotismo. Dios, los hombres y la historia juzgarán mis actos públicos»
Carta a Bolívar
Finalmente, en 1829, San Martín retornó a Buenos Aires, pero decidió exiliarse en Europa ante la intensificación de la guerra civil en Argentina. Pasando sus últimos años en Boulogne-Sur-Mer, Francia, donde falleció en 1850.
Hoy recordamos el legado de José de San Martín, reconociendolo como el Padre de la Patria y Libertador de América; «Capitán General» titulado ortorgado por Chile; y Fundador de la República» y «Protector del País» en Peru.
Fuentes:
Juana Manuela 